jueves, 4 de septiembre de 2014

MUEVAN FICHA, POR FAVOR…


Cada Septiembre, con el inicio del año escolar para tod@s, escucho que esta vez el gobierno pondrá todas sus fuerzas en crear las condiciones sociales y económicas necesarias para la generación del  empleo. Pero yo no lo creo, será porque tampoco  creo que les corresponda a ellos  la generación del empleo en sí misma. Y digo yo, ¿eso no deberían hacerlo las empresas privadas o las del tercer sector (Sindicatos, Fundaciones , Asociaciones, etc)?.
Actualmente yo vivo en Navarra. Cuando llegué hace ya casi 6 años, observé que  todo el mundo tenía empleo, más o menos bien remunerado. La tendencia durante muchos años era que mucha juventud, desde temprana edad, dejaban los estudios para colocarse en fábricas, talleres, y otros trabajos bien pagados, creando hábitos de consumo que pasaban necesariamente por un buen coche y una buena casa, todo cuanto más grande mejor.
Pero el desorden lo vimos más tarde. Justamente el año de mi llegada a esta provincia, allá por el 2009, la crisis comenzaba a hacer su brutal mella y los resultados no tardaron en hacerse visibles. A pesar de que en Navarra y País Vasco se creía que la gente vivía en un oasis anti-crisis, resultó que un año después, el empleo se había destruido más rápido que la mitad española en los últimos años.
Entonces la gente empezó a ver la realidad. Las personas jóvenes venían en manada  al sindicato en el que yo trabajaba a pedir trabajos no muy cualificados en las mismas fábricas, talleres y otros que anteriormente les habías posibilitado el vivir bien. Las personas de más edad perdían sus trabajos  a ritmo desorbitado, consecuencia de los ERES continuados y los despidos masivos que comenzaron a hacerse el pan de cada día.
Al final, como el resto de la mayoría de las y los españoles, a todo el mundo les tocó el verse pillados por elevadas hipotecas y con pagos varios insostenibles, iniciados por la crisis financiera que destruyó los sueños de ladrillo hasta ahora hechos realidad. Empicadas cayeron las ventas de todo tipo y todo ello llevó a muchos sectores a la ruina, provocando reducciones de plantillas generalizados.
Eso sí, a nadie le preocupó ni se ocupó que la población más tocada fueran las mujeres, que empezamos a perder nuestros trabajos, a retroceder en nuestros derechos laborales y, como consecuencia, en todo lo demás,  a ritmo descomunal. (De esto hablaré en otro post).
Resumiendo, actualmente en Navarra, como en el resto de España, no se crea empleo ni de broma, a pesar de que algunas personas pensamos que hay sectores en los que destacamos y que tienen mucho futuro, sectores potenciales en farmacia, bienes de equipo, laboratorio, ingeniería civil, genética,  medicina, y muchos otros.
 A ver si los sindicatos y los centros de formación cambian el chip de una vez en las ofertas  formativas y de empleo que presentan, no sólo gestión, servicios integrales o carretilleros. Amplíen la oferta, por favor y a ser posible, apliquen la perspectiva de género. Trabajen en ofrecer empleos, no tanta orientación repetitiva. Ah, y que nadie se engañe, los recortes  en sectores estratégicos como la educación o la sanidad, ya están siendo visibles en el entorno actual inmediato, con resultados de tremendo fracaso escolar.
 Zapater@ a tus zapatos. El Gobierno  que se dedique a los que tiene que hacer, entre otras cosas, defender ante Europa la marca Spain (que no es poco, ni sencillo), pero la generación de empleo que lo hagan las empresas. Son ellas quienes deben apostar por la innovación y la mejora de la calidad de sus productos,  pero ojo! que eso no se consigue reduciendo  las plantillas o devaluando los salarios , como han hecho y les han permitido hasta ahora.  
A ponerse las pilas, porque no veo hayamos cambiado nada, después de todo lo que hemos pasado en estos seis años, yo no veo que hayamos  aprendido demasiado.
No os parece?
Propuesta: Revisa los cursos de los sindicatos y centros de formación más cercanos y comprueba si incluyen en sus listas algún curso de los sectores innovadores de los que hablo en el post.

miércoles, 3 de septiembre de 2014

HAGAMOS LAS PRESENTACIONES….
Soy una mujer  que supera la barrera inexorable de los 40 y pico, cifra que, según parece, separa el mundo de las vivas y las muertas, y que sólo parece afectar al sexo femenino.
Podría decirse que soy una persona afortunada, por mi amplia formación y experiencia de trabajo, por vivir una vida bastante intensa, haber formado mi propia familia a tres y  por tener un sitio donde caerme muerta.Gran parte del mérito se la debo a  mis padres y a su tenacidad en hacer de mí una persona culta y preparada. Pero también yo he contribuido lo mío, ya que siempre he puesto empeño en ser alguien autónoma e independiente.
 Desde muy niña, me he preocupado de contrastar aquellas realidades post-franquistas en las que nací y crecí, que no  acababan de cuadrarme en absoluto. Eso me llevó a elegir muy mucho a mi actual pareja y amistades (no sin antes llevarme las oportunas decepciones), a elegir vivir cómo quería  y a tener descendencia cuando a mi me diera la gana y no cuando marcara ese supuesto reloj biológico, que todo el mundo se empeña en decir que existe y que pretende marcar tozudamente el ritmo de una persona.
De toda esa coctelera mental heredada de los tiempos que me han tocado vivir,  nació y se forjó finalmente una mujer que finalmente se hizo politóloga, que sumé estudios de derecho, un montón de “post “especializados en temas de empresa, economía , sociología, Igualdad, ,etc,etc,etc.. amplios conocimientos más aplicados a mi persona que a las empresas, ya que no parece ir acorde mi formación con estos tiempos revueltos y escasos en letras.
Siempre me ha interesado todo lo que tenga que ver con el mundo de las ideas y cuanto más dispares mejor. Me sumergí muy temprano  en el arte de la música, de la que disfruté largos años, hasta dejar hace poco la llave del local de ensayo donde pasé tantos momentos apasionantes.
En los últimos años, me dediqué a profundizar en la Igualdad de Oportunidades (más teórica que otra cosa), siendo un tema al que dedico cierto tiempo de mi vida, estudiando y analizando el feminismo , intentando contestar, todavía sin respuesta, ¿cómo es posible un mundo donde, por el simple hecho de ser mujer, tengo menos oportunidades que los hombres?.
En conjunto, hoy puedo afirmar que no he resultado ser lo que de niña imaginé. Verdaderamente, me hubiera gustado  ser “ escritora”. De hecho, durante años hice  mis pinitos con la pluma y aunque nunca he conseguido serlo en “estricto sensu”, siempre he sacado pequeños artículos  allá donde pequeñas publicaciones me lo han pedido y permitido. Con la era digital he visto un filón perfecto para dar rienda suelta a la tecla y, por todo ello,  he retomado la idea de escribir, encontrando en el Blog un formato ideal y no formal para mis aspiraciones.
En cuanto al contenido, me encanta hablar de los entramados sociales, políticos o institucionales , pero sobre todo , soy una mujer sencilla y “callejera “ que veo y siento las cosas del entorno, por lo que bien puedo permitirme el opinar y charlar con algún argumento que otro.
En fin, como veis, pico un poco de todo, “ma non troppo”,  pero no me importa para nada el estar dentro de la media.Me defino como una mujer madurita, todavía de buen ver, cooper-activista y feminista, que aspira a ser, como mucho, una aficionada bloquera .

Bienvenidas y bienvenidos a “La Re-existencia”!!

martes, 2 de septiembre de 2014

La Re-existencia

El motivo de llamar al blog “La Re-existencia” es porque me encantaría contar experiencias pasadas y presentes,  mías y de otras personas a las que conozco o no en este incierto camino que es mi vida, relatos que despiertan  recuerdos, reviven historias, tratando de dibujar un futuro más esperanzador y positivo.
Escribo, en fin, sobre  historias,  opiniones, críticas y pareceres varios, referidas a mí  y a mi gente, al entorno, al difícil momento que nos está tocando vivir. Simplemente expreso lo que veo y os aseguro que todo es  verdad, a pesar de que muchas veces parezca pura ficción, por lo rocambolesco, por lo absurdo e incoherente.

Tiene que ver , el nombre,  con la “resistencia” sí  , la nuestra, la resistencia que hay hoy y la que hubo siempre a soportar lo inaguantable, a conformarnos con lo que nos dan, a tragar con lo infumable del despropósito elevado a su máximo exponente. Yo sigo sin resignarme, a pesar de todo…